Microcuento: Danza Mágica

Cajita Musical 

La bella bailarina de porcelana dormía, era de cabellos castaños y ojos azules, las facciones de su rostro blanco eran pequeñas y delicadas, vestía mallas celestes con un tutu del mismo color en el que reposaban elegantes sus manos, formando un arco con sus brazos y con los talones juntos en zapatillas de ballet en la primera posición, todo a su alrededor estaba completamente oscuro.

De pronto el sonido de una cuerda retumbó en el ambiente despertando a la muñeca, entonces la luz inundó su escenario al mismo tiempo que una música tranquila y tintineante comenzaba a escucharse, la muchacha sonrió. Avanzo saltando con el pie derecho adelante y luego con el pie izquierdo, estiró su mano hacia adelante y la devolvió, luego la otra, estiró una pierna y un brazo a un lado y empezó a dar giros estirando y devolviendo sus extremidades, sus pasos eran seguros, se sentía bien, sentía pasión, estaban solo ella y el escenario, cerró los ojos y disfruto de su danza.

Tomó impulso y saltó estirando ambas piernas en un Grand jete, cayó con gracia, movió sus brazos luego también movió el tronco, se tiró al suelo, agachó y estiró su cuello se levantó e hizo 1, 2, 3, 4 giros con una sola piernas mientras la otra se doblaba y estiraba, entonces llamaron a Julieta a comer, por lo que la niña tuvo que cerrar su cajita de música y así terminar con la mágica danza de su bailarina.